Biografía
Los recitales de Boleros Imperfectos no son tales, sino el elemento principal de su terapia, con la que pretenden curar los males que, llegada la madurez, les aquejan. Cantar era la solución, de acuerdo ¿pero qué estilo? Buscando uno a medio camino entre la milonga y el rock duro, su psiquiatra fue preciso: el bolero. Esto les obligo a visitar Cuba y empaparse de su música, pero como llevaban impermeables por si llovía se quedaron a medias, de ahí la imperfección. Además, como buenos enfermos, no son estrictos con el tratamiento prescrito e incorporan a su repertorio tangos, swing, rumbas, blues, pasodoble, música medieval o reggae. Música popular a fin de cuentas.
No obstante, su potencial tiene más que ver con la capacidad de sus letras para arrancar la carcajada. Sus canciones, y los monólogos que las envuelven, abordan los problemas que conllevan el amor y el sexo, la convivencia en pareja o la llegada de la madurez, pero también la sátira política o la crítica social.
Tanto es el empeño que Boleros Imperfectos ponen en transmitir su mensaje que los personajes de sus canciones cobran vida a veces, y es posible así conocer de primera mano el testimonio de playboys venidos a menos, vendedores de enciclopedias, sacerdotes con problemas conyugales, hippies desencantados, cínicos adúlteros, lunáticos doctores, concejales ineptos e incluso urogallos en celo.
Luthiers de bajo coste, hijos espurios de Javier Krahe, hermanastros de Académica Palanca, Boleros Imperfectos no ocultan ni sus influencias ni sus objetivos: cantar a modo de autoayuda y provocar la risa al tiempo que la reflexión. Lo intentan desde el inicio de esta crítica década siempre que encuentran algún lugar que se arriesgue a incluirlos en su programación.
Algunos lo han hecho, la mayoría en la provincia de Málaga, como el Teatro Cánovas (VII Ciclo de Humor 2012), el Teatro Echegaray (Festival Terral 2016), el MIMMA, la Cochera Cabaret, la Sala Chela Mar, el Auditorio de Benalmádena, El Escenario Café Teatro, el Club Cambaya de Antequera y algunos más que seguro agradecerán la exclusión de esta lista.
Han participado, además, en el ciclo «Teatro en las azoteas» de 2013, en el ciclo de «Música con Humor» (2014) de la sala Maynake, en el ciclo de «Músicas nada serias» de Antequera, en la Noche europea de los investigadores y en la gala de la primera edición de los premios Ateneo de Teatro.